-¡Doctor!
¡Doctor!-Comenzó Kesha a gritar, asustada y los demás la apoyaron,
gritando con ella.
Poco tardaron, un
doctor y una enfermera llegaron a la habitación.
-Tienen que
salir.-Les ordenó ella.
Todos salieron de
aquel cubículo y esperaron impacientemente, sentados.
-Llamaré a
Harry.-Kesha se levantó con paso firme y miró a los demás.-Y de
paso voy a la cafetería a por café. No aguanto estar un minuto más
aquí.
-Voy contigo.-Le
dijo Niall mientras se levantaba.
Ambos comenzaron a
caminar hacia la cafetería del hospital. Llegaron tras unas
escaleras.
-¿Me coges un café
mientras yo llamo a Harry?-Preguntó ella.
-Vale.
La chica se alejó
un poco y marcó un número de teléfono. Tecla verde. Listo.
-Hola.-Saludó una
voz al otro lado del teléfono, que no era precisamente la de Harry.
-¿Holly?
-Sí, soy yo.
¿Quién eres?
-Soy Kesha. ¿Está
Harry?
-Sí. ¿Para qué
quieres hablar con él?
-Para que venga al
hospital. Heather se ha puesto peor.
La chica rubia
resopló. Ahora que estaban tomando una pizza en su casa... Tenía
que fastidiarlo aquella morena idiota, pero no podía arruinar su
faceta de niña buena o la descubrirían:
-Sí. Ahora mismo
se pone.
Tras unos breves
segundos sonó una voz masculina, la de Harry:
-Hola, Kesha. ¿Qué
pasa?
-Tienes que venir.
Heather está muy mal. Cuando tú te has ido ha comenzado a llorar y
después parecía que se había ahogado y no podía respirar. Si el
médico hubiese tardado un poco más en venir, no creo que hubiera
sobrevivido.
-Voy para allá. En
menos de dos minutos estoy allí.
-Vale... Hasta
lu..-No le dio tiempo de terminar la frase, Harry ya colgó.
Suspiró y cerró
el móvil
Harry apagó el
móvil rápidamente.
-Me tengo que ir al
hospital.
-¿Heather?-Preguntó
la rubia.
-Sí.
-¿Quieres que
vaya?-Preguntó ella.
-No. Mejor que no.
-Vale.. Oye,
Harry..¿tú y yo..?
-No.-Respondió él
seco. Lo tenía claro. No quería a Holly, pero ella no iba a
rendirse.
-¿Por ahora?
-No. Holly, no
insistas. No te quiero.. lo siento.
-Vale.-La chica
sonrió tristemente, se acercó a él y le dio un beso en la frente,
después se acercó a su oído y susurró.-Te estaré esperando.
El chico se alejó,
estremeciéndose, sonrió y tras despedirse salió de casa de la
chica.
Kesha llegó hacia
la mesa donde Niall le esperaba. Sentado, bebiendo su café con
leche.
-Toma, el tuyo.-El
irlandés le ofreció el otro vaso.
-Gracias.
La chica se sentó
a su lado, y bebió un sorbo de su bebida.
-¿Qué te ha
dicho?-Preguntó el rubio.
-¿Qué?
-Harry...que qué
te ha dicho.
-Ah..Que ahora
viene para acá.
-Me alegro. Pensaba
que estaba enfadado con Heather por lo que ocurrió hace un
momento.
-No es el mejor
momento para enfadarse.
-Ya.. Pero sabes
como es Harry.
-Sí, lo sé..
Ambos se quedaron
en silencio, y casi al mismo tiempo se llevaron sus vasos a la boca y
bebieron otro sorbo de sus cafés.
-Bueno, ¿te lo
pasaste bien bailando ayer conmigo?-Preguntó él con una sonrisita
burlona.
-No.-Respondió
ésta haciendo que sus mejillas se pusieran coloradas.-No sé bailar,
hice el ridículo.
-Que no es verdad.
Lo hiciste muy bien.. Lo que pasa que te falta practicar más ese
tipo de baile.
La chica se encogió
de hombros.
-No me interesa
mucho bailar.-Contestó volviendo a llevarse su vaso a la boca.
-¿No? Es
divertido.
-Para ti..
El chico soltó una
carcajada y Kesha lo miró interrogante.
-¿Por qué te
ríes?
-Porque eres la
primera chica que no le gustaría que le enseñase a bailar.
-A lo mejor soy la
primera que conoces, pero no la única... Seguro que si le preguntas
a Heather, deniega la idea.
El irlandés
asintio con la cabeza.
-Tienes razón.
Esperaron unos
minutos, y al fin vieron a Harry entrar por la puerta.
-Hola.-Les
saludó.-¿Vamos arriba?
-Sí. Espera que
voy a pagar mi café.-Le contestó Kesha.
-No hace falta.-Se
adelentó a decir Niall.-Ya he pagado yo.
-Ah..Entonces,
¿cuánto te debo?-Preguntó ella sacando un billete de cinco euros
de su cartera en forma de hamburguesa.
-Nada. Tómalo como
un regalo.
-Pero..
-Pero nada.-Le
interrumpió el rubio con una sonrisa.
La pelirroja esbozó
una sonrisita, mientras volvía a meterse el dinero en la cartera, y
esta en su bolso marrón.
-Gracias.-Le
contestó al chico.
-No hay de qué.-Le
dijo él.
Los tres subieron a
la planta donde se encontraban todos. En ese momento una joven
enfermera se acercó a ellos.
-No sabemos qué ha
ocurrido. Pero ya está mejor. Mañana por la mañana, podrá irse a
casa.-Les informó amablemente.
-Gracias.-Les
dijeron los demás.
Cuando la mujer se
fue. Louis tomó la palabra.
-¿Por que no
compramos unas flores y algo de eso, y mañana vamos a su casa a
dárselos? Para celebrar su recuperación.
-Eso está muy
bien.-Dijo Bryan.-¿Por qué no vamos ya a comprarlos? Su madre está
aquí y no va a estar sola.
Todos aceptaron la
idea. Bajaron por las escaleras y, tras cruzar la puerta, comenzaron
a caminar con el atardecer.
Hablaban, reían
entre ellos.. y es que todos estaban mucho mejor, su amiga por fin se
había recuperado y ya al día siguiente podría volver a casa.
-¡Mirad!-Abie
señaló una preciosa tiendecita rústica.
-Vaya.. tiene que
haber muchas cosas..¿Por qué no entramos?-Propuso Liam.
-Sí. Pero no
todos, somos demasiados. Que se queden unos aquí y otros entren para
comprar algo. Después vamos a comprar unas flores e igual, pero
cambiamos los turnos, los que antes se quedaron fuera, entran. Y los
que antes entraron, pues se quedarán fuera. ¿Qué os
parece?-Preguntó Zayn.
-Sí. Por mí
bien.-Aceptó Yuriko.
Todos le dieron el
visto bueno y se divieron en dos grupos. Yuriko, Zayn, Louis y Harry
se quedaron fuera. En cambio: Abie, Liam, Kesha, Niall y Bryan
entraron en la tienda.
Comenzaron a mirar
de un lado para otro. Hasta que Abie sonrió y cogió entre sus manos
una cajita musical con una bailarina. Cuando la abrías podías
escuchar la canción de "El Cisne".
-Ya lo tengo.-Dijo,
haciendo que todos le mirasen.
Les enseñó la
caja. A todos, les parecía bien. Era bonito y además dentró podían
ponerle una nota.
-Bueno, voy a
pagar. Salid fuera.-Anunció la morena.
-Después nos dices
cuanto tenemos que dar cada uno.-Le dijo Kesha.
Abie asintió con
una sonrisa.
Liam se quedó con
ella.
-Vaya.. Es preciosa
la caja.
-Sí. Me gusta para
mí, y todo...
-¿Te
gusta?-Preguntó él.
-Sí. Mucho.
El chico sonrió.
La dependienta
metió la caja musical en una bolsa y dijo a la chica:
-Doce con ochenta y
cinco.
La morena pagó y
fue a salir cuando Liam le paró.
-Elige una caja
musical.
La chica lo miró
extrañada.
-¿Qué te diga
cuál es la que más me gusta?
-Exacto.
La chica se quedó
pensativa hasta que al fin se decidió.
-Ésta.-Señaló
una caja musical con un carrusel dentro.
-Buena elección.-Le
apremió Liam. Y para la sorpresa de ella, lo cogió y tras pagarlo
se lo tendió a ella.-Toma. Es un regalo para ti.
La chica lo cogió,
y aún sorprendida, dijo:
-Pero...
-Acéptalo.-Le
interrumpió él.
-Gracias.-Y esbozó
una enorme sonrisa.-Pienso ponerlo en el lugar de mi cuarto que más
se vea.
-Seguro que queda
precioso.
Y tras un
intercambio de sonrisa, salieron.
-Vaya.. cuanto
tardábais.-Les recriminó Yuriko, impaciente.
-Lo sentimos.-Se
disculpó la morena, agachando la cabeza para que no vieran sus
pómulos ardiendo.
-No importa.-Dijo
Kesha con una sonrisa.
Siguieron andando,
ahora, hacia una floristería. Llegaron a la más cercana. Ahora
Yuriko, Zayn, Louis y Harry entraban para coger las flores.
-Os esperamos
aquí.-Les dijo Niall desde la distancia.
-Vale.-Contestó
Harry alzando el dedo pulgar, en señal de OK.
Los otros cinco se
sentaron en un banquito bajo la sombra de un árbol.
-¿Y esa bolsa,
Abie?-Preguntó Bryan al darse cuenta de que había dos bolsas, y no
una sola.
-Liam me ha
regalado otra caja musical para mí.-Dijo sonriente. Acto seguido la
sacó de la bolsa y se las enseñó a los demás.
-¡Vaya..!-Exclamó
Kesha.-¡Qué bonita!
-¿A que sí?-Dijo
la morena contenta.
-¡Qué detalle,
Liam!-Le apremió la pelirroja al chico.
El aludido sonrió.
-Gracias.-Dijo,
algo azorado.
Tras unos minutos
hablando sobre la bonita caja musical, volvieron los otros cuatro.
Yuriko llevaba un bonito ramo de flores rojas.
A todos les
encantó. Era realmente precioso.
Tras eso, quedaron
en que Kesha se quedara con los regalos, y al día siguiente, a las
doce de la mañana, quedarían frente a la casa de Heather y todos
juntos entrarían para darle las sorpresa. Se despidieron y cada uno
se fue para su casa.
Kesha llegó tras
unos minutos. Aparcó el coche, salió de él y abrió la puerta de
casa con las llaves.
-¡Hola!-Vociferó.
-Hola
cariño.-Richard salió de la cocina con una lasaña en la
mano.-Cambiate que la comida está en la mesa.
-Vale. No tardo ni
dos segundos.
Subió rápidamente,
se cambió y se puso su pijama de rayas.
Bajó al salón y
allí vio a sus dos hermanas.
-Hola Susi.-Saludó
a su hermana menor con un besito en la nariz. La pequeña sonrió,
cogió su Nenuco en la mano derecha, y en la izquierda el mando de la
tele. Puso Disney Channel, donde salía Shake It Up.
Saludó a Candy,
quien no paraba de mirar el móvil una y otra vez.
Comenzaron a cenar,
conversando sobre la serie televisiva que Susi veía.
De repente, el
móvil de la rubia sonó al fin. La chica sonrió y rápidamente lo
cogió.
-¿Si?-Preguntó
impaciente.
Miró a su padre, y
tapando el altavoz del móvil le preguntó.
-¿Me disculpas un
momento?
-Sí. Pero no
tardes.
-No te preocupes.
La chica salió del
salón pegando saltos de felicidad.
Siguieron cenando,
hasta que la rubia llegó.
-¿Quién
era?-Preguntó Richard.
-Una amiga. Que ya
me ha confirmado lo que sospechaba. Que el chico que conocí a
principios de trimestre está loquito por mí.
-¿Cuántos años
tiene?-Preguntó su hermana, interesada.
-Veintitres.
Richard en ese
momento, que estaba bebiendo un poco de su Coca Cola, la expulsó,
haciendo una pedorreta con los labios.
-¿QUÉ?-Vociferó.-¿Veintitres?
¡Pero si te saca siete años!
-Pero la edad no
importa.-Se quejó la rubia.
-¿Cómo que no
importa? Eres menor de edad.
-Pero..
-Nada de peros,
Candy. No vas a salir con ese tío.
-Papá, es mi vida,
no la tuya. Salgo con quien quiero, y ese es el chico del que estoy
enamorada. No puedes prohibirme enamorarme.
-¿Enamorada? ¡Pero
si solo tienes 16 años, por el amor de Dios!
-¿Y? La edad no
importa para que uno se enamore.
-Te he dicho que
no, y es que no.
La rubia se levantó
con ira.
-¡Pues me voy de
casa!-Dijo alzando la voz. Y con paso firme corrió hacia la puerta,
la abrió y, tras salir, la cerró con un sonoro portazo.
Richard la siguió,
abrió la puerta y viendo a su hija a lo lejos le gritó:
-¡Ven aquí ahora
mismo!
-Iré cuando no
decidas sobre mi vida.
-Pero eres una
menor...
-¡Me da igual!
El padre murmuró
algo para sí y suspiró, cerró la puerta y entró en el salón.
-Kesha, ve a por tu
hermana, para hacerle entrar en razón y que vuelva a casa.
La chica asintió.
Cogió su abrigo y salió.
Arrancó el coche y
comenzó a buscar a su hermana menor. Pronto la encontró, sentada en
un banco del parque, sola, cabizbaja.
Aparcó y corrió
hacia ella.
-¡Hermana!-Le
saludó.
La rubia le
devolvió el saludo.
-¿Qué
quieres?-Preguntó.
-Tienes que volver
a casa.
-No. Papá no tiene
derecho a elegir mi vida.
-Candy.. tienes que
comprender que te gusta un chico mayor de edad.. Te saca muchos
años..
-Pero la edad no
importa..
-No importa en
cierta parte...
-Ya.. pero es que
no puede prohibirme salir con él, si esa es mi elección.
-¿De verdad que lo
quieres?
La rubia miró a su
hermana a los ojos, con los suyos brillantes e iluminados.
-Sí. Y mucho. Es
la primera vez que siento algo así. Siempre he estado con chicos de
quita y pon.
La mayor soltó una
carcajada al escuchar a su hermana.
-Pues entonces papá
lo entenderá. Pero tienes que darle tiempo y esperar a que él lo
asimile.
Candy hizo una
mueca y suspiró.
-Vale.
Tras un abrazo
ambas entraron en el coche y llegaron a casa.
Candy habló con su
padre, y al final éste lo entendió... Aunque con la condición de
que tenía que presentárselo primero y que debía dar su opinión.
Tras eso, las dos
hermanas subieron hacia sus cuartos.
Antes de que Kesha
entrara, Candy la paró:
-Gracias,
hermana.-Y tras darse un abrazo. Cada una se fue por su lado, para
dormir de aquel día tan largo.
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Capítulo 16:) Espero que os guste y comentaad:)
Que capítulo tan dulce :) Primero la iniciativa de los regalos, luego el momentazo de Liam y para rematar, una historia familiar :3
ResponderEliminarEstoy deseando ver qué pasa cuando vayan a llevarle los regalos a Haeather ^^
Un besito ;)